Bodegas Casa Santos Lima – D.O. Lisboa
Casa Santos Lima ha sido un negocio familiar por muchas generaciones y fue fundado por Joaquim Santos Lima, quien, para el giro del Siglo 19, estaba entre los más grandes productores y exportadores de vinos portugueses. María Joao Santos Lima y Jose Luis Santos Lima Oliveira da Silva, nieta y nieto del fundador, han liderado Casa Santos Lima desde 1990, replantando la mayoría de los viñedos y modernizando toda su estructura productiva.
Bodegas Quinta da Alorna – D.O. Tejo
Quinta da Alorna fue creada por manos de D. Pedro de Almeida.
Tras haber conquistado la resistente Praça Forte de Alorna en las cercanías de Goa, donde ocupó el cargo de virrey, recibió del rey de Portugal, D. João V, el título de 1.º marqués de Alorna.
D. Pedro de Almeida fue abuelo de D. Leonor, IV Marquesa de Alorna – la poetisa Alcipe. En aquella época (1723) la finca, perteneciente al Marqués de Alorna, era conocida como la finca de Vale de Nabais.
Muchos años después, dos de las hijas de la marquesa de Alorna vendieron la “Quinta dos Alorna” (así se llamaba) a los condes de Junqueira, y los herederos la vendieron en pública subasta, pasando a manos del Dr. Manuel Caroça, bisabuelo de los actuales accionistas, un respetado dentista, corredor de mercancías y gran hombre de negocios que terminó convirtiéndose en el único propietario de Quinta da Alorna.
Bodegas José Maria da Fonseca – D.O. Península de Setúbal
Una empresa familiar con casi dos siglos de historia, y que ha sabido mantenerse al día sin dormirse nunca en los laureles. José Maria da Fonseca elabora vinos desde 1834, fruto de la pasión compartida de una familia que ha sabido conservar y proyectar la memoria y el prestigio de su fundador. Consciente de la responsabilidad de ser el productor de vino de mesa y Setúbal Moscatel más antiguo de Portugal, José Maria da Fonseca sigue una filosofía de desarrollo permanente, invirtiendo constantemente en investigación y producción, combinando las últimas técnicas con el saber hacer tradicional. Un ejemplo de ello es la Bodega José de Sousa Rosado Fernandes, en Reguengos de Monsaraz, Alentejo, donde se mantiene la tradición romana de la fermentación en vasijas de barro junto a la última tecnología.
